lunes, 16 de noviembre de 2009

80.- Lola está sola
La vaca atrevida expone su cuerpo al sol y recibe el calor de la arena en la playa solitaria. Lola está sola. Y sola contempla el ir y venir de las olas. Sola, escucha el bramido que el mar le acerca. Ella le responde con un prolongado mugido incitante.
Lola espera que el mar le acerque el deseado toro a su orilla. Pero no llega. Sin embargo, el astado brama cada vez más cerca. La reclama.
Entre rugidos y bramidos, las olas avanzan hasta el encuentro de sus pezuñas y salpican con sensualidad la blanca espuma salitrosa en su cara. Ahora, los bramidos son tan recios que Lola siente miedo. Y sola, con un balanceo de cola y estampando una boñiga en la arena, se aleja de la orilla.
Seguramente, Lola vuelva mañana para escuchar el bramido de su toro bravo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario